Pedir perdón es muy importante cuando se ha hecho algo mal. Disculparse significa que hay un profundo deseo de asumir la propia responsabilidad de las acciones. Este reconocimiento permite que cualquier relación pueda seguir adelante, sea del tipo que sea.
Sin embargo, pedir perdón no es nada fácil. De hecho, mucha gente no sabe cómo hacerlo -con lo fácil que es decir «lo siento»-. En su lugar, hacen otra serie de cosas que son muy poco eficaces y que, de hecho, pueden llegar a complicar las cosas más aún.
¿Significa esto que quieres pedir perdón y que están buscando la forma de hacerlo? La verdad es que, en la mayoría de las ocasiones, lo que significa es que el otro no se ha enterado de que tiene que arrepentirse para dar un paso en la dirección correcta o que están buscando una forma de enmascarar la necesidad de una disculpa por su parte.
Vamos a ver cuáles son estas actitudes. Te servirán para intentar buscar formas para resolver los conflictos y también para aplicarte el cuento cuando te toque a ti pedir perdón.
#1 – Hacer como si no hubiera pasado nada con un extra de euforia
Algunas personas hacen como si no hubiera pasado nada y se comportan con una gran euforia, completamente desproporcionada. Esta es una actitud es una negación de la situación que puede ser muy perjudicial a medio o largo plazo. Esta manera de «echar pelillos a la mar» permite salir con facilidad del bache, pero no soluciona nada.
A veces, estas acciones consiguen un pase de un amigo de los de toda la vida, pero puede llegar a cansar esa incapacidad para disculparse. Le perdorás, te perdonará, los dos los sabéis, pero eso no significa que no haya que arrepentirse.
#2 – Ser super amable después de un error
Algunas personas asumen que el otro les perdonarán si son más amables y complacientes después de un error. Tal vez esto ayude a limar asperezas, pero ser agradable de esta manera antinatural puede crear irritación y dar una imagen contraria a lo que se pretende.
#3 – Hacer un regalo
Si vas a pedir perdón con flores o con cualquier otro regalo, asegúrate de que dices «lo siento» y lo dices a la cara. El perdón no se compra, y puede resultar molesto. Puede funcionar la primera vez, pero como costumbre, es algo detestable.
Un regalo o un gesto significa mucho. Si abusas de ello para pedir perdón, tanto los regalos que hagas como los gestos que tengas con la otra persona dejarán de tener sentido en todas las situaciones.
#4 – Atacar
A algunas personas les cuesta tanto pedir perdón que necesitan arremeter contra el otro por la propia frustración que les supone sentirse inferiores. Puede resultar absurdo, pero ocurre. En lugar de asumir la responsabilidad de las cosas, van a buscar la manera de que sea el otro el que tenga que pedir perdón. Esto no sólo no ayuda a poner fin a la discusión actual, sino que añade una capa de resentimiento a la amistad en su conjunto.
#5 -Hacer una broma del error
Bromear sobre lo que ha ocurrido es una forma de aligerar el problema, pero no por eso implica una disculpa, aunque realmente quieras pedir perdón. Es como si pedir perdón fuera algo demasiado serio e importante, desproporcional al error. Pero una disculpa nunca está de más.
Si te interesa saber cómo conseguir tener relaciones personales más saludables, no te pierdas el artículo Comportamientos tóxicos que alejan a la gente de ti