El tomate es una hortaliza muy saludable y que no debería faltar en la dieta diaria. Esto se debe a que los tomates tienen una gran cantidad de nutrientes y antioxidantes. Además, son bajos en calorías.
Los tomates son ricos en vitamina A y potasio. También son ricos en un antioxidante llamado licopeno, el cual puede reducir el daño causado por los radicales libres y se ha relacionado con un menor riesgo de algunas formas de cáncer. El licopeno también tiene propiedades anti-inflamatorias que son buenas para los vasos sanguíneos.
Además, los tomates crudos contienen vitamina C, ácido fólico, vitamina E, vitamina K y fibra. Contienen también una pequeña cantidad de hidratos de carbono y proteínas.
A continuación vemos de qué maneras se puede consumir más tomate para que resulte más interesante y creativo, especialmente para las personas a las que no les guste mucho.
Tostadas con tomate
El tomate crudo picado o rallado se puede colocar sobre una tostada de pan junto con aceite de oliva y un poquito de sal y tomar para desayunar, como tentempié a media mañana o para merendar. También se pueden preparar tostas para aperitivo y añadirles diferentes tipo de queso o cualquier otro ingrediente que combine. Por ejemplo, le puedes añadir cebolla picada, hierbas aromáticas, aceitunas picadas o ajo muy picado.
Ensaladas con tomate
Prácticamente cualquier tipo de ensalada admite tomate fresco, tanto si es vegetal como de pasta. También puedes hacer ensaladas en las que el tomate es el protagonistas, como la ensalada Caprese, un receta típica italiana que se hace con tomate, queso mozzarella y albahaca fresca, todo regado con un buen aceite de oliva y vinagre balsámico.
Pasta con tomate
Si hay una combinación estrella en la cocina es la pasta con tomate. Una buena forma de aprovechar las propiedades del tomate es hacer la salsa casera, aunque sea con tomates enlatados (lo cuales son muy saludables porque contienen más licopeno que los tomates frescos). Otra forma de acompañar la pasta con tomates es hacer la pasta a la puttanesca, que lleva tomate, pero no en salsa.
Tomates a la parrilla
Aunque parezca que el tomate no es el mejor ingrediente para hacer a la parrilla, lo cierto es que este modo de preparación intensifica el sabor de los tomates. Añádele un poco de sal y pimienta y tendrás un acompañamiento o guarnición excepcional. También puedes usarlos para hacer salsas.
Tomates rellenos
Separa la parte superior del tomate y guárdala. Vacía el tomate por dentro y mezcla lo que saques con tus ingredientes favoritos: arroz blanco, carne picada rehogada, queso, verduras rehogadas, queso, etc. Haz una masa e introdúcela en el tomate. Puedes usar la parte que cortaste a modo de sombrero. Esto puedes meterlo unos minutos al horno para calentarlo o servirlo en frío.
Gazpacho
El gazpacho es una sopa fría de vegetales que admite muchos tipos de preparación y al que se le pueden incorporar muchos ingredientes. Lo único que no puede faltar es el tomate junto con el aceite de oliva y el vinagre.
Tomates asados
Los tomates asados son una excelente guarnición. Puedes asarlos junto con otros vegetales, como calabacín, berenjena, pimiento o cebolla y conseguir un primer plato o acompañamiento para carnes y pescados.
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