Incorporar técnicas de relajación en nuestra rutina semanal o incluso diaria es una excelente manera de mejorar nuestra calidad de vida y prevenir ataques de ansiedad, depresión, problemas cardíacos, insomnio y un largo etcétera. Desarrollar la habilidad de relajar nuestro cuerpo y nuestra mente cuando lo deseamos tiene, además, importantes beneficios para nuestra salud pues fortalece el sistema inmune, evita lesiones debidas a contracturas musculares y previene el envejecimiento prematuro.
Finalmente, debemos destacar que las técnicas de relajación son también especialmente útiles para el control del dolor, la ira y el estrés.
Por ese motivo, en Salud y Amistad hemos decidido crear una guía lo más exhaustiva posible que permita a nuestros lectores conocer de primera mano las técnicas más eficaces, probarlas y comenzar a practicar aquellas que más les gusten de forma regular.
En primer lugar, es necesario diferenciar la relajación muscular de la relajación mental, dado que un individuo puede estar relajado muscularmente y aún así, sufrir un cuadro de depresión. No obstante, este tipo de fenómenos son bastante inusuales, dado que nuestro cuerpo suele reaccionar y manifestar físicamente su estado anímico. Es por ello que muchas técnicas basadas en la relajación física logran tener efectos especialmente beneficios para la mente.
La relajación en sí misma puede tener lugar de forma natural, espontánea e inconsciente si el entorno es propicio para ello. Sin embargo, en la sociedad actual es muy frecuente encontrar factores que contribuyan a generar algún tipo de tensión física o mental sobre nosotros.
Por ese motivo, es tan importante aprender a relajarnos de forma voluntaria, ya sea con un propósito puramente físico o desde una perspectiva psicológica.
Hay un gran número de técnicas de relajación. En Salud y Amistad hemos hecho una selección de aquellas que consideramos más relevantes o desarrolladas.
Respiración diafragmática
La respiración diafragmática es propia de los bebes, motivo por el cual ha sido estudiada y aplicada en los adultos para comprobar cómo les afectaba. Entre otras cosas ha sido utilizada como técnica de relajación y de mejora del rendimiento físico, gracias al incremento de la oxigenación muscular.
Autohipnosis
La autohipnosis es un fenómeno de sugestión autoinducida, es decir, una técnica a través de la cual un mismo sujeto se concentra y dirige su mente a voluntad mediante instrucciones verbales o visualizaciones. Su aplicación con fines relajantes es especialmente efectiva pero se requiere una gran dosis de concentración y sugestibilidad. Debe tenerse en cuenta que, a partir de la autohipnosis, se han desarrollado muchas técnicas de autosugestión con enfoques distintos. Una de las notables es la siguiente.
Entrenamiento autógeno
Esta técnica, desarrollada por el neurólogo Johannes Heionrich Schultz, es un complejo método que se practica en sesiones grupales y que abarca un conjunto de ejercicios de meditación psicofisiológica, basados en la recreación de diversas sensaciones en distintas parte de nuestro cuerpo, como el peso o el calor en brazos y piernas, el movimiento del corazón, etc.
Sigue leyendo en la segunda parte de nuestra guía de técnicas de relajación y descubre aquellas que más te gustan.
Imagen: RelaxingMusic