Cuando hablamos de suplementos alimenticios, hay una opción cada vez más popular vinculada al cuidado de la salud: los probióticos. Estos son bacterias beneficiosas que viven en el intestino y que se encuentran concentrados en diferentes tipos de alimentos, suplementos y medicamentos. Uno de los nombres más reconocidos en este campo es Kaleidon, una línea de productos que busca mejorar el bienestar intestinal, fortaleciendo la flora intestinal.
De acuerdo con lo anterior, en este artículo nos enfocaremos en contarte qué son los probióticos, para qué sirven y cómo tomarlos, partiendo de la opinión sobre su consumo de Alberto López de Vistafarma.
Primero lo primero, ¿Qué son los probióticos?
Antes de ahondar en las utilidades de los probióticos y tomar la mejor decisión al respecto, es necesario tener claro a qué se refiere este concepto.
Partamos por saber que los probióticos son microorganismos vivos que ayudan a mejorar la estabilidad de la microbiota de nuestro organismo. Cuando se consumen en las cantidades adecuadas, facilitan la digestión, la absorción de nutrientes y el fortalecimiento del sistema inmunológico.
Los probióticos se encuentran en la formulación de diferentes alimentos, especialmente productos lácteos fermentados como yogur, bebidas lácteas, leche y queso. También se encuentran en forma de suplemento, el cual se consigue fácilmente en diferentes farmacias.
En España, el consumo de probióticos va al alza; sin embargo, estos deben ser consumidos con cuidado y teniendo en cuenta que no todos sirven para lo mismo y que no todos los productos cumplen con los criterios científicos y de calidad para ser considerados como probióticos. Esa es la razón por la que en los siguientes apartados ahondaremos en sus usos y en la manera adecuada de ingerirlos.
¿Para qué sirven los probióticos? Beneficios principales
Entre los principales beneficios del uso de los probióticos vale la pena mencionar:
- Fortalecimiento del sistema inmunológico. Los probióticos pueden ayudar a modular la respuesta inmune, especialmente en la mucosa intestinal, ya que aumentan los niveles de inmunoglobulinas y linfocitos. Además, permiten mantener el equilibrio intestinal frente al consumo de antibióticos, envejecimiento, estrés o enfermedades gastrointestinales.
- Previenen y enfrentan enfermedades digestivas. Los probióticos son útiles aliados para combatir una bacteria en específico: Helicobacter pylori. Este patógeno puede causar enfermedades como gastritis tipo B, la úlcera péptica y el cáncer de estómago.
- Son muy útiles para mantener el equilibrio de la flora intestinal, reduciendo así molestias menores, como aquellas asociadas a los gases, la hinchazón y el estreñimiento.
- Disminuyen el riesgo y duración de enfermedades vaginales y del tracto urogenital. Los probióticos Lactobacillus ayudan al restablecimiento de la flora vaginal, reduciendo las posibilidades de la presencia de infecciones o enfermedades vaginales. Además, combate la aparición de vaginitis, una infección vinculada al uso de antibióticos y al cambio hormonal.
- Por otro lado, son grandes aliados en la lucha contra infecciones respiratorias, ya que aumentan la actividad de los macrófagos alveolares, los cuales luchan contra agentes infecciosos en las vías respiratorias. Pueden combatir enfermedades como sinusitis, otitis, bronquitis y neumonías.
- Facilitan la digestión de productos con lactosa. Estos microorganismos liberan la enzima b-galactosidasa, la cual evita que se presenten síntomas de intolerancia, como el dolor abdominal o flatulencia.
- Alivio del síndrome del intestino irritable, con probióticos como lactobacillus rhamnosus y fermentos lácticos vivos.
Cómo tomar probióticos: Dos maneras para lograrlo
Lo primero a considerar en este aspecto es, como mencionamos anteriormente, que los probióticos se pueden obtener de dos maneras: a través de alimentos llamados probióticos naturales o mediante el consumo de suplementos con probióticos.
Entre los alimentos probióticos más recomendados se encuentran el yogurt natural, el kéfir (similar al yogurt, fermentado con levadura y bacterias), el kombucha (bebida fermentada a partir de té negro), la leche fermentada, legumbres, hortalizas y productos orientales a base de soya, el chucrut (fermentación de hojas frescas de repollo o col), los pepinillos y la masa madre.
Ahora bien, frente a los suplementos probióticos deberás saber que existen varios tipos de ellos, los cuales dependen del tipo de probiótico que los compone. Entre ellos se encuentran el Bifidobacteria animalis (fortalece sistema inmune y facilita la digestión), Bifidobacteria bifidum (tolerancia a la lactosa), Lactobacillus acidophilus (absorción de nutrientes y combate de infecciones vaginales), Saccharomyces boulardii (tratamiento de la diarrea), entre otros.
Para consumirlos, es importante tener en cuenta que los suplementos deberán ser consumidos antes o después de una comida, para que los microorganismos puedan llegar al intestino y multiplicarse como deben. También, es fundamental acompañar su consumo con la alimentación sana rica en fibra y la realización constante de ejercicio.
Así finalizamos nuestro artículo sobre qué son los probióticos. Esperamos haber aclarado las posibles dudas al respecto. Recuerda que en caso de surgir alguna otra o no ver mejoría, siempre es recomendable acudir a expertos. Por ahora, solo sobra preguntarte: ¿conocías los beneficios de los probióticos? ¿los consumes regularmente? ¡estaremos ansiosos por leerte!