Gracias al desarrollo de avanzadas investigaciones alrededor de la adicción a diferentes sustancias y otros trastornos adictivos comportamentales, se ha determinado que la adicción es un trastorno completamente tratable y manejable. Dicho tratamiento generalmente se compone de dos pilares fundamentales: el tratamiento farmacológico y el psicológico, que a su vez se dividen en 4 fases, de las cuales hablaremos a lo largo de este artículo sobre cómo se trata una adicción.
Tratamientos y procesos integrales, ¿cómo se trata una adicción?
Lo primero que debes saber al respecto es que los tratamientos para el consumo de sustancias o para algún tipo de adicción de carácter comportamental no solo están diseñados para aliviar los síntomas físicos y psicológicos propios de una adicción, sino también aquellos emocionales y sociales que se desencadenan de esta situación.
De acuerdo con las necesidades del paciente, los tratamientos se ofrecen en diferentes lugares, con diferentes grados de intensidad y se enfocan en el tipo de sustancia que se consume, si este es el caso. Además pueden incluir medicamentos o sustancias específicas para el manejo de la abstinencia.
Ahora bien, como mencionamos anteriormente, el tratamiento para una adicción se compone, generalmente, por 4 fases que involucran todos los factores mencionados anteriormente. Estas son:
1. Desintoxicación
El primero paso para tratar una adicción es la desintoxicación. Este es un proceso a través del cual se realiza la restauración fisiológica del organismo luego de haber sido afectado por el consumo de diferentes clases de sustancias. Aunque este paso no siempre es necesario, su conveniencia siempre debe ser evaluada por un médico especialista en función del estado de salud de la persona.
De acuerdo con la susodicha evaluación, la persona podrá realizar la desintoxicación de manera ambulatoria en su domicilio o hacerla en un centro de desintoxicación avalado, como es el centro Neri; en este ambiente alejado de la ciudad y rodeado de la naturaleza, se encuentran todas las herramientas necesarias para tratar adicciones al alcohol, la cocaína, al cannabis, entre otros.
2. Deshabituación
Luego de haber eliminado del cuerpo las sustancias tóxicas que lo estaban afectando, es momento de iniciar una fase de re-educación en la que se adquiere conciencia de la dependencia a la sustancia o al comportamiento, preparándose para mantener la abstinencia a través de las técnicas adecuadas. En esta fase asume un rol protagónico el psicólogo de adicciones, ya que será el encargado de entrenar a la persona para identificar situaciones, hábitos o conductas que puedan conducirlo a una recaída. Además, se brinda información y estrategias para controlar la impulsividad, manejar la ansiedad y fortalecer la capacidad de resolución de problemas.
3. Rehabilitación
El siguiente paso sobre cómo tratar una adicción es la rehabilitación. En esta etapa se ponen en práctica las estrategias aprendidas con el ánimo de modificar los comportamientos tanto en el ámbito individual como en el ámbito social. En la rehabilitación se fortalece el proceso para mantener la abstinencia.
Ahora bien, en lo que se refiere a las adicciones comportamentales, el proceso de tratamiento para una adicción también incluye terapias conductuales que ayudan a modificar las actitudes y comportamientos derivadas de la adicción. Entre estas terapias vale resaltar:
- Terapia cognitivo conductual: reconocer, evitar y hacer frente a las situaciones de riesgo.
- Control de contingencias: reafirmación positiva como uno de los caminos para no consumir sustancias psicoactivas.
- Terapias familiares: Ayuda a pacientes y familiares a reconocer los factores que influyen en las pautas de consumo.
- Facilitación de 12 pasos: Preparar a la persona en programas de apoyo mutuo.
- Terapias de estimulación motivacional.
4. Reinserción
Por último, pero no menos importante, la persona rehabilitada se reintegra como miembro activo en todos los ámbitos de la vida cotidiana: laboral, social, familiar, etc. En este punto el riesgo de recaída es bajo, pero se debe prestar mucha atención para mantenerlo a raya.
¿Cómo se afrontan las recaídas al hablar de cómo tratar una adicción?
El último aspecto que queremos tratar para hablar de cómo tratar una adicción son las recaídas. Lo primero que debes saber al respecto es que las recaídas no necesariamente significan que el tratamiento ha fallado, sino que son, más bien, parte del proceso. Es una señal que indica que hay que prestar atención a todos los factores que hacen parte del tratamiento, para identificar cuál de ellos no está dando los resultados esperados y modificarlo consecuentemente.
A pesar de lo anterior, las recaídas suelen ser muy peligrosas, por lo que es necesario afrontarlas y prevenirlas de la manera adecuada. Para ello se deben identificar las situaciones de riesgo de cada persona y desarrollar estrategias de acuerdo con ellas; así se trabajan las expectativas de control y de confianza, disminuyendo el riesgo de llegar al extremo de una recaída.
Y tú, ¿conocías el proceso de tratamiento de una adicción? ¿Conoces algún otro punto clave para lograrlo con éxito? Cuéntanoslo todo en la sección de comentarios, ¡estamos ansiosos por leerte!