¿Estás pensando en empezar a correr? ¿Te gustaría practicar eso que ahora llaman running y que está tan de moda? Si te has estado informando sobre lo que implica correr, seguro que has leído y oído muchas cosas buenas, bastante cosas no tan buenas y también alguna que otra tontería.
Sea lo que sea lo que hayas escuchado, seguro que hay algunas cosas que nadie te ha contado. No es que sean todas malas, pero algunas resultan algo incómodas. En este artículo te vamos a contar todo eso que la gente que corre no suele contar y que conviene que conozcas para que sepas en dónde te vas a meter.
7 cosas que nadie te contarás sobre el running
#1 – Habrá días que odies correr
La gente que practica running habla de ello con emoción y entusiasmo. Pero, no te engañes, no todos los días son así. En alguna ocasión todo runner siente odio por lo que hace. ¿Por qué? Las razones son múltiples. Tendrás que empezar a correr para comprobarlo. La buena noticia es que luego se pasa.
#2 – Correr no es tan barato como se piense
Uno de los argumentos más utilizados para justificar que el running es un deporte para todo el mundo es que es barato practicarlo. Es barato en el sentido de que no hay que pagar por correr, pero un buen equipamiento cuesta bastante dinero, empezando por unas buenas zapatillas (imprescindibles) y siguiendo por ropa adecuada y algunos accesorios útiles, más aún si corres con frío.
#3 – Las lesiones están a la orden del día
Dese irritación de la piel y ampollas hasta lesiones en las articulaciones por no ejecutar una técnica correcta, correr por superficies irregulares o sobreentrenar: estas son algunos de los problemas que te encontrarás tarde o temprano si practicas running.
#4 – En algún momento necesitarás parar a orinar
En largos recorridos te surgirá la necesidad de orinar. Esto es especialmente problemático para las chicas. Tenlo presente si vas a correr durante más tiempo del que tu cuerpo aguanta y vete preparado/a si vas a correr por una zona donde no puedes encontrar un aseo público.
#5 – La colada incrementará considerablemente su volumen
Todo lo que te pongas para correr irá directo a la lavadora, aunque no lo hayas tenido puesto más de una hora. Y eso incluye mallas, camisetas, sudadera y ropa interior.
#6 – Habrá días que no puedas correr, y eso te pondrá de muy mal humor
El hábito de correr puede crear adicción, pero habrá días que podrás hacerlo, bien por cuestiones de salud, bien porque tengas alguna obligación laboral o familiar. Y te pondrás de muy mal humor.
#7 – Corres el riesgo de convertirte en uno de esos runners que no saben hablar de otra cosa que no sea correr
La gente que no corre no entiende la pasión, la energía, el entusiasmo y la vitalidad que se siente al correr. Y muchos miran mal a esos «locos del running» que «corren solo porque está de moda». Correr es algo que se ha hecho siempre. Es el nombre lo que está de moda, si acaso. Antes lo llamaban jogging y mucho antes footing. ¡Qué más da! Uno no se machaca así por una moda, sino por una pasión sin límites y porque te hace sentir genial. Pero no lo andes diciendo mucho por ahí, por si acaso.
Consideraciones finales
No es por meterte miedo, pero luego no digas que nadie te avisó. De todas formas, tan malo no será esto del running cuando cada vez engancha a más gente al deporte.