La apuesta de amar es una de las más audaces y complejas que podemos hacer los seres humanos. Es ese impulso vital de la vida, que puede llenarnos de energía, ilusión y felicidad, pero también de angustias, ansiedad y dolores. Es mucho lo que hemos deconstruido en relación a la idea del amor. Poco a poco le vamos restando idealización, para que, sin perder el romance, sea un amor más realista, posible y sostenible en el tiempo. Pero la realidad es que no siempre resulta fácil sostener un vínculo feliz, y muchos de nosotros hemos sido presas, protagonistas o víctimas, de comportamientos tóxicos en una relación.
El término quizá está un tanto de moda, y no es raro que lo usemos a la ligera. Por ello, en Salud y Amistad nos animamos a tratar este tema, intentado a arrojar luces que nos permitan una mejor comprensión de nuestras relaciones, y  el desarrollo de comportamientos más sanos, serenos y que nos conduzcan a estar bien. Los comportamientos tóxicos en una relación pueden afectar profundamente la salud mental y emocional de las personas involucradas. A continuación te contamos sobre algunos de los más comunes, cómo identificarlos y las estrategias para manejarlos y buscar ayuda profesional. ¡Empecemos!

8 comportamientos tóxicos en una relación que encienden alarmas

Comportamientos tóxicos en una relación

Cuando hablamos de una relación tóxica, nos referimos a esa clase de vínculos en los que las conductas, comportamientos y acciones de una o ambas partes resultan emocionalmente dañinos. Es importante saber que una relación tóxica no se puede dar tan solo en el plano romántico, sino que también podemos vivirla en la familia, en el trabajo o con amistades. A veces, las formas de manifestarse pueden ser claras y tajantes, y otras veces, muy sutiles. Veamos algunos de los comportamientos más claros, que pueden estarnos hablando de toxicidad en el vínculo.

1. La manipulación emocional

Entre los comportamientos tóxicos en una relación más comunes, se destaca la manipulación emocional. Esta conducta suele ser en ocasiones difícil de detectar. A menudo quienes la sufren pueden sentirse culpables, confundidas y dependientes de la persona que los manipula. Esta conducta se puede manifestar en el uso del afecto como una herramienta de control, en la culpabilización constante y en la alteración de situaciones para hacer sentir mal a la otra persona.

2. El control y el dominio

Otra conducta clave para distinguir la toxicidad en una relación es la necesidad de control y dominio de una persona sobre la otra. Es un comportamiento que poco a poco va dañando la autonomía y el autoestima de la persona controlada, haciéndola sentir incompetente y atrapada. El control tóxico se puede evidenciar en actitudes como querer controlar a dónde va la persona, cómo se viste, con quién habla, cómo invierte su tiempo e incluso su dinero.

3. La desvalorización y las constantes críticas

Otro de los comportamientos tóxicos en una relación que más daño emocional pueden hacer a quien lo padece es la desvalorización y las críticas constantes. Si la persona que sufre de ello no tiene una autoestima sólida puede empezar a dudar de su valía y sentirse incompetente. Esta conducta nociva se evidencia en acciones como minimizar los logros de la pareja, ridiculizar sus opiniones y hacer comentarios despectivos regularmente

4. Los celos y la posesividad extrema

Los celos son una emoción humana natural, pero cuando se vuelven extremos y no razonables, pueden ser tóxicos. De hecho, pueden hacer de una buena relación un espacio de inseguridad y presión constante que terminará por alterar a ambos miembros de la pareja. Cuando una persona tiene celos no justificados y tóxicos, acusa constantemente al otro sin fundamento, espía, sigue y viola la privacidad de su móvil o correo electrónico, además de restringir las interacciones sociales de su pareja, creando un ambiente de constante vigilancia y tensión.

5. El aislamiento social

Otro de los comportamientos tóxicos en una relación es promover el aislamiento social de la pareja. Empleando la manipulación, creando conflictos y sembrando desconfianza, la persona tóxica promueve que la pareja se aisle de sus amigos e incluso de sus familiares. Todo ello ayuda a aumentar la dependencia y, sin duda, crea un ambiente de inestabilidad nada saludable psicológicamente.

6. El abuso físico y verbal

Los gritos, los insultos, amenazas, humillaciones e incluso golpes son de los comportamientos tóxicos más graves y que jamás debemos permitir. Estas conductas no solo tienen consecuencias devastadoras para la salud mental de la víctima, sino que incluso pueden poner en riesgo su integridad y su vida. Si una persona se encuentra en esta situación, es de importancia vital que busque ayuda psicológica y que desarrolle las herramientas para poner límites y cuidar de sí misma.

7. Los engaños y la deshonestidad

En el mundo moderno, en el que existen muchos formatos diferentes de relación, los engaños y la honestidad no solo no tienen el menor sentido, sino que se cuentan entre los comportamientos tóxicos en una relación que más la dañan y erosionan. Las mentiras frecuentes, ocultar información o incluso llevar una doble vida con relaciones paralelas son acciones que destruyen la base más importante de cualquier vínculo sano: la confianza. 

8. Culpar a la pareja por los problemas propios

Otro claro síntoma de que una relación se ha vuelto tóxica es que una persona culpa de manera constante y consencuente a la otra por sus propios problemas, frustraciones o fracasos. Este comportamiento proyecta la responsabilidad y los sentimientos negativos en la otra persona, generando un ciclo de culpa y resentimiento. Es importante recordar que estamos en pareja porque la vida al lado de esa persona resulta más linda que sin ella, pero no debemos perder jamás nuestra individualidad y asumir las responsabilidad de las acciones y de nuestra propia vida y felicidad. Somos los únicos conductores de nuestro destino.

En definitiva, las relaciones de pareja y las relaciones humanas en general son vitales para nuestro desarrollo, bienestar y alegría. Pero debemos estar siempre atentos a que vincularnos nos represente sensaciones positivas y desafíos para convertirnos en mejores personas. Los comportamientos tóxicos en una relación pueden resultar agotadores, desgastantes y lastimarnos en profundidad. Así que si sientes que estas sumergido en un vínculo tóxico, no dudes en buscar ayuda profesional para atravesar esta etapa.

Y tu, ¿Experimentaste alguno de estos comportamientos tóxicos en una relación? ¿te gustaría compartir tus vivencias con nosotros? Estaremos deseando leer tu comentario. Mientras tanto, y para ilustrar el tema, te dejamos con esta selección de frases para poner límites a personas tóxicas. ¡Hasta la próxima!