Los hábitos de la sociedad moderna nos llevan de forma marcada hacia el sedentarismo. Buena parte de nosotros trabajamos con una computadora, lo que nos lleva a pasar largas horas sentados, y en posiciones que no siempre son las mejores para la salud de nuestra columna vertebral. Los efectos de estos malos hábitos que se han vuelto tan comunes, se dejan ver en dolores de espalda o de cuello que afectan nuestra calidad de vida. Si experimentas alguna de estas molestias, en la clínica de fisioterapia en Zaragoza puedes encontrar una solución efectiva.
Cuando hablamos de una buena postura corporal, nos referimos a una serie de elementos que contribuyen a que nuestro cuerpo se vea más derecho y estilizado, y los músculos de nuestra zona media se mantengan fuertes y en óptimas condiciones. La respiración, el tono muscular y la salud de nuestros huesos, son algunos de los aspectos que se benefician al mantener una correcta postura corporal. También mejora nuestro aspecto y presencia física. Acompáñanos a descubrir las mejores técnicas para cuidar nuestra postura.
Las mejores técnicas para corregir la postura corporal
Cuida la posición de tu cintura
La zona media del cuerpo es el centro de nuestro equilibrio y fuerza. Tanto en la cintura como en la pelvis descansa parte del peso corporal, y es una zona fundamental para mantener derecha y alineada nuestra postura. Al pasar mucho tiempo sentados, solemos deformar nuestra posición, lastimando a los músculos de la zona media.
Si te interesa fortalecer tu cintura y pelvis, hacer series de ejercicios como las zancadas puede ser de gran utilidad. No es necesario que dediques mucho tiempo, si no cuentas con él. Tan sólo unas tres o cuatro series de doce a quince repeticiones, serán suficientes para activar y fortalecer los músculos de las caderas y cintura, ayudándote a mantener una postura más saludable.
Relaja y endereza tu espalda
Definitivamente, los músculos de la espalda son los protagonistas de las dolencias que se generan como consecuencia de las malas posturas corporales. Tanto si pasas muchas horas sentado frente a la computadora, como si llevas un estilo de vida sedentario, con mucho tiempo frente a la tele o en el sillón, tu espalda empezará a resentir de diferentes maneras. Los músculos de la espalda alta suelen debilitarse, haciéndote perder fuerza. Los que se ubican en la espalda media se contraen, generando dolores y molestias.
Los problemas en la postura de la espalda suelen abarcar casi todas las actividades. No sólo están presentes al estar mucho tiempo sentado, sino que también se suele incorporar una postura torcida o jorobada al estar de pie o al caminar. En este sentido, es importante que, cuando estés en reposo, procures hacer constantemente ejercicios de estiramiento. Estos te ayudarán a evitar las contracturas que se presentan por falta de movilidad. Cuando estés de pie, practica el hábito de mantener tu cuerpo erguido, con la espalda recta y el abdomen contraído.
Cuida la postura de tus hombros
Otro aspecto fundamental cuando hablamos de mantener una postura saludable, que prevenga posibles dolores musculares o contracturas, es el cuidado de los hombros. Mantener una inadecuada postura en tu espalda, suele redundar en una deformación en la forma en que mantienes tus hombros. Las personas que pasan mucho tiempo sentadas suelen verse afectadas con frecuencia por este mal hábito.
Para combatir los problemas de postura en tus hombros, es recomendable que hagas pausas en las que puedas realizar ejercicios de estiramiento que alivien la presión en la zona. También es importante que recuerdes de manera consciente mantener tus hombros hacia atrás, llevando adelante el pecho.
Mantén tu cuello relajado
Otro de los puntos de equilibrio fundamentales del cuerpo humano, es el cuello. Esta zona de tu cuerpo se encarga de sostener el peso de tu cabeza, y es una de las que se afecta y se tensiona con mayor facilidad. El hecho de tener la cintura o la espalda contraídas, suele llevar a problemas a nivel de cuello. Es fácil percibirlos porque sentirás tensión en la zona, y verás que la cabeza se inclina hacia adelante con respecto al eje corporal.
Para trabajar en la correcta postura de tu cuello, procura mantener todo el tiempo la cabeza alineada con la espalda. Cuando estés sentado, trata de estirar tu cuello y barbilla de forma ligera, hacia arriba. También son útiles los masajes en la zona, que además de placenteros, contribuyen a estirar los músculos y liberar presión acumulada.
Presta atención a tu forma de caminar
La última técnica fundamental para cuidar tu postura, es prestar atención y tomar conciencia sobre la forma en que caminas. Seguro te habrás fijado al estar en la calle, en personas que lucen inclinadas o jorobadas. Esto no es más que el resultado de mantener una postura inadecuada por mucho tiempo, transformándola en hábito.
Si tomas la costumbre de cuidar la forma en que caminas, tu cuerpo no sólo se verá más estilizado, sino que te cansarás menos. Tu energía será más potente y duradera. Prueba caminar manteniendo tu cuello, espalda y cintura alineados, procurando mantener tus movimientos acompasados, y dando pasos que no sean extremadamente cortos ni largos. Sumando estas sencillas técnicas a tu cotidianidad, verás como empiezas a sentir los resultados en tu fuerza y vitalidad.