Hay determinadas épocas del año en las que, sencillamente, no vamos a retrete con la regularidad que deberíamos. El tráfico intestinal lento o estreñimiento puede deberse a muchas y variadas causas. En el artículo de hoy en Salud y Amistad hemos querido resumir aquellas más relevantes. Échales un vistazo y si es necesario consulta con tu médico de cabecera.
Causas de estreñimiento en nuestro estilo de vida
Estrés y ansiedad
Son dos factores que influyen en nuestra vida de muchas maneras. Una de las más incómodas es, sin duda, el estreñimiento. La falta de tranquilidad y de un ritmo de vida más pausado puede afectar seriamente al adecuado tránsito intestinal.
Sedentarismo físico
La carencia de ejercicio físico es otro de los motivos más frecuentes del estreñimiento. Un trabajo en oficina, el uso de un transporte para acudir al trabajo o hacer la compra y la ausencia de una rutina de ejercicios pueden derivar en un pobre tráfico intestinal
Cambios repentinos de costumbres
Los viajes, las mudanzas, el cambio de trabajo, de la dieta o, incluso, de nuestros horarios pueden derivar en un cuadro de congestión estomacal. En realidad, este aspecto no es más que un ejemplo muy específico de una causa de estrés aislado y ocasional que, por desgracia, puede implicar un breve periodo de estreñimiento.
Aspectos de nuestras dieta que afectan al tránsito intestinal
Exceso de proteína animal
Una dieta con abundante proteína animal, especialmente fuentes densas como la carne roja, puede implicar episodios de estreñimiento sino se compensa adecuadamente con otro tipo de alimentos a los que aludimos abajo.
Poca fibra
La ausencia o escasez de fibra en nuestra dieta dificultará el tráfico intestinal regular. El consumo de verduras y legumbres es fundamental si queremos prevenir el estreñimiento.
Comidas procesadas
Las comidas procesadas y la comida rápida no sólo tienen aportes nutricionales inferiores, sino que pueden afectar a nuestro tráfico intestinal y derivar en estreñimiento, especialmente si abusamos de ellas.
Falta de líquidos
La adecuada hidratación de nuestro cuerpo y, por supuesto, de nuestro tracto digestivo es el primer recurso si queremos evitar congestión o tráfico intestinal lento. Sin embargo, no todo vale. Aquí la mejor opción con diferencia es el agua. De hecho, los refrescos y el alcohol pueden generar el efecto contrario.
Enfermedades que dificultad el tránsito
Afecciones intestinales
La inflamación de las paredes intestinales, el síndrome de intestino irritable e, incluso, la presencia de un tumor pueden conllevar la dificultad del tránsito intestinal. Por ello, es siempre recomendable realizarnos un chequeo de rutina periódicamente para descartar cualquier factor extraordinario de este tipo y, por supuesto, tratar la enfermedad.
Hipotirodismo y diabetes
Hay además enfermedades como el hipotiroidismo y la diabetes o medicamentos no directamente relacionados con el tracto digestivo que pueden, sin embargo, implicar la aparición de estreñimiento. Por ese motivo, es necesario consultar con nuestro médico los efectos secundarios de los medicamentos que tomemos, así como los síntomas de determinadas enfermedades.
Como puedes comprobar las causas del tránsito lento son bastante variadas. ¿Has descubierto alguna que pueda estar afectando a regularidad con la que vas a al baño?
Imágenes: Álvaro Campo, Derek Σωκράτης Finch